jueves

Tarta de hojaldre con fresones


INGREDIENTES:

  • Masa de hojaldre (de la que venden ya preparada).
  • Leche entera.
  • Preparado en sobre de natillas.
  • Preparado en sobre de gelatina de fresa.
  • Azúcar.
  • Canela en Rama.
  • Corteza de limón.
  • Mantequilla.
Se pone el horno a calentar a 220º durante unos 10-15 mínutos (hasta que notemos que está bien caliente). Mientras, en una bandeja (redonda o cuadrada dependiendo de la forma en la que queramos la tarta) untamos un poco de mantequilla en la base, lo justo para que no se pegue la masa y colocamos encima el hojaldre ya preparado. Procuraremos hacerle un borde grueso alrededor para luego ponerle el relleno y que no se nos salga por los extremos. A continuación, untamos también un poco de mantequilla sobre el hojaldre y espolvoreamos un poco de azúcar. Pinchamos un poco la masa (con un tenedor mismo) para que no se hinche demasiado con el calor y lo metemos al horno. El tiempo de cocción dependerá del grosor de la masa (entre 10 y 20 minutos), así que se tendrá que ir vigilando. Una vez veamos que la masa está dorada y ha aumentado un poco de tamaño la sacamos del horno y apagamos este último ya que no será necesario utilizarlo después.

Mientras se hace la masa en el horno, aprovechamos para preparar las natillas. Las instrucciones suelen estar en el dorso de la caja. Para esta tarta yo utilicé 3/4 l. de leche (3 vasos) y 2 sobres de natillas. Aunque recomiendan en las instrucciones poner un sobre para esa cantidad de leche, pensé que era necesario poner el doble, ya que quería que quedaran luego bien espesas en la tarta, a modo de crema (y el resultado fue bueno).
Pues bien, se pone medio litro de leche en un cazo, junto con unas 5-6 cucharas soperas de azúcar (sí se quiere más dulce, pues más), una rama de canela y un poco de ralladura y se pone a calentar. Mientras tanto, el resto de leche se mezcla en un vaso o cuenco junto con los 2 sobres de natillas. Se baja el fuego al mínimo y se añade la leche mezclada con el sobre y se le va dando vueltas contínuamente durante unos 2 minutos. Después, se apaga y se deja enfríar un poco.
Por otro lado, preparamos la gelatina (las instrucciones también vienen al dorso de la caja). Yo puse un vaso de agua a hervir, nada más apagarlo le puse un sobre de gelatina en polvo, removí y le añadí un vaso de agua fría, y a enfriar. Pero quizás poniéndole un poco de azúcar mejor aún (cómo dice el dicho: cuanto más azúcar...).

Y por último, lavar los fresones y cortar a láminas. Espolvorear con azúcar y dejar que éste sea absorvido por la fruta (si los fresones son muy dulces no hace falta añadirle azúcar).Ya sólo queda darle forma. Vertimos las natillas sobre el hojaldre (quitándole antes la rama de canela) hasta que quede al ras del borde (cuanto más grueso hagamos el borde, más gruesa quedará también la crema). Colocamos encima las láminas de fresones (la decoración ya depende del arte de cadacual) y por encima de los fresones la gelatina. Cuando esté fría meter en la nevera y dejar reposar. De un día para otro está más buena. ¡Y a disfrutar!
No requiere mucho tiempo ni muchas habilidades. Es la primera vez que la hago y ha salido muy buena. Yo he elegido fresones porque la fruta en general no me gusta demasiado, pero se puede hacer con cualquier tipo de fruta cambiando el sabor de la gelatina o improvisando, cómo ha sido mi caso.

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