El método es el mismo que las 2 paellas anteriores que hice. Ponemos una paella al fuego, cubrimos la base con aceite y añadimos un buen puñado de sal en el centro. Incorporamos el pollo y el conejo troceado y lo freimos bien hasta que se dore (pero sin que llegue a quemarse). Una vez bien frito, añadimos las verduras (la judía verde también troceada) y rehogamos un rato hasta que empiece a dorarse también. La "tavella" es una judía blanca muy típica en la paella valenciana, pero a mí particularmente, no me gusta y no suelo echarle nunca al arroz (pero eso ya según los gustos de cada cual).
Pues bien, una vez está la carne y la verdura frita, ponemos en el centro un poco de pimentón y el tomate rallado, lo removemos un poco y después lo removemos junto con la cerne y la verdura. Acto seguido (para que no se queme el tomate) añadimos el agua, que llegue casi hasta el borde de la sartén, y dejamos que hierva. Cuando llegue a embullición, añadimos un par de ramitas de romero y el azafrán, y lo dejamos que vaya cociendo.
Cuando el agua llegue por debajo de los remaches de las asas, lo volvemos a cubrir otra vez de agua y dejamos que vuelva a cocer. La segunda vez que el agua llegue a las clavijas del asa, lo probamos de sal, añadimos un poco si vemos que falta (tiene que tirar a salado porque luego el arroz absorbe bastante sal), y ya podemos disponernos a echar el arroz.
La cantidad la echo también a ojo, dependiendo si somos más o menos comensales. Pero para 6 personas, suelo echar unos 750-800 gr de arroz, y siempre suele sobrar un platito extra. En 20 minutos el arroz estará en su punto.
Cocinar la paella en leña es complicado, y nunca sale igual. Tienes que controlar la leña para que en los primeros minutos el fuego esté fuerte pero que a medida que el agua va disminuyendo el fuego disminuya también. En los últimos 5 minutos el fuego debería ser ya casi inexistente. con la práctica se le va cogiendo el truco. Si se cocina con butano es más sencillo ya que puedes bajar y subir el fuego sin problemas. Y cómo siempre digo, si se deja reposar el arroz unos 5 minutos antes de comerlo, mejor.
Cómo decoración, a veces, se suele poner medio limón cortado a modo de estrella en el centro. O acompañar el arroz en el plato con un trocito de limón.
Y para mi padre, que sigue sin poder comer este tipo de cosas, y ya de paso para aquellos a los que les gusta la paella pero por la dieta, el colesterol o lo que sea no se lo puede permitir, pues hay otras formas de hacer la paella más sana (aunque nunca está tan buena, claro). Le puse en una paella individual, un filete de pechuga de pollo a trozos, con a penas una gota de aceite para q no se pegara, lo asé junto con una ramita de romero, incorporé la verdura, le di un par de vueltas, el tomate rallado (sin pimentón), una pizca de sal, y lo cubri con un poco de caldo de pollo y verduras de la noche anterior. Y cuando hirvió añadí el azafrán y luego el arroz. El resultado lo podemos ver en la imagen.
Ponemos en una paella o sartén aceite, un puñadito de sal, unos dientes de ajo y una hoja de laurel. Freimos las costillas y las sacamos de la sartén (al igual q los ajos y el laurel, que ya habrán dejado el sabor). Incorporamos en el aceite la coliflor cortada a trocitos y, cuando esté a medio freir, añadimos el pimiento troceado. Cuando esté todo dorado, añadimos una cucharada pequeña de pimentón y un poco de tomate triturado. Damos un par de vueltas a todo y volvemos a poner la carne. Le damos un par de vueltas más y añadimos el agua cubriéndolo todo.
Cuando hierva el agua, añadimos el azafrán y el romero y dejamos que cueza todo bien, añadiendo agua si es necesario. Cuando lleve cociendo de unos 45 minutos a una hora y veamos que el agua va por debajo de los remaches de las asas, añadimos el arroz (para 4 personas con unos 350-400 gr más que suficiente). Lo dejamos unos 20 minutos controlando que no se evapore el agua demasiado deprisa.
